El minúsculo gesto de una sonrisa
El minúsculo gesto de una sonrisa...
Abre las ventanas de lo que hoy comienzo a mostrar.
Una sonrisa que no alcanzas a
vislumbra si es de alegría o tristeza...
Y casi siempre es la segunda.
Una mueca imperceptible que incluso, intentas buscar detrás
de unos ojos indescifrables.
Esa soy yo...
Pálida y delgada, frágil y rota.
¿Te ha hecho sonreír alguna
vez la tristeza?
¿Has estado tan miserablemente triste
que has sonreído igual?
Cómo si doliera menos,
pero en realidad es es al revés?.
Es mágica la sonrisa
de una persona triste,
la envuelve en un halo de melancolía
mezclada con el arte de sus ojos.
Hasta en los peores momentos
la sonrisa se adelanta y abre las puertas a la melancolía.
Quien me conociera profundamente
leería mis ojos como un libro abierto.
Un libro infinito y cruel.
Hablaría de batallas,
de esas que los buitres aman,
batallas épicas en las que la tierra
se tiñe de rojo y por las noches,
huele a muerte y lamentos.
Un libro que duele y no rompe silencios.
Un libro sin final...
Entonces la vaga sonrisa triste
hace fuerza y aflora
como una rosa carmín entre las cenizas...
Marca la mejilla mientras
una lágrima se escapa y rueda acariciando el pómulo ...
¿Porque sonríes?
Me preguntaron una vez
y no pude explicarle
porque él no sabía leer.
Me preguntaron una vez
y no pude explicarle
porque él no sabía leer.
Noor Yahann
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15/12/2024
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