Aún no he terminado de caer

 


Siento un vacío...
Un abismo enorme, un trecho tan abismal que no se que hay del otro lado, una brecha oscura, un siniestro espacio invisible, aquel lugar impenetrable y maldito como los cementerios viejos. Voy a la vera, con temor de caerme, como un malabarista de la vida haciendo piruetas en la cuerda floja. Tengo miedo de que algo me atrapé y me lleve a los confines que todavía no conozco. Siempre se puede caer más abajo, nunca acabas de conocer el fondo y el camino cada vez se hace más estrecho...

La bruma se levanta con risa burlona y juega en mí senda confundiendo de a ratos mí conciencia.

"No he tocado el fondo aún" ¿Cuánto más falta? ¿Es así la angustia de vivir con un dolor que no se va y nadie cura? ¿Es así vivir sin un remedio o un aliciente?¿No es suficiente ya todo lo sufrido? ¿A caso es un castigo? ¿Una quimera del destino? ¿Hay solución?

¿Puedo caer más profundo? ¿Es acaso la noche interminable solo para algunos? Quizás estamos condenados desde el principio de los tiempos a ser almas dolientes, aquellas que el dolor transforma en sombras y luego e leyendas de terror.

El lodo ha cubierto mis pies y el frío se ha depositado entre lo huesos como un anticipo de lo que vendrá. La soledad avanza a galope montada en el caballo de la desolación.

Pronto me quedaré sin camino en medio de tanta oscuridad y después el abismo mismo...

No sé que hay más abajo, pero aún no he terminado de caer.

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